miércoles, marzo 23, 2005

Aja! No seas un Eclesiano

Este fin de semana tuve la oportunidad de ser atendido por le ministerio de la Costa. Visité las ciudades de Barranquilla y Cartagena en donde estuve reunido con los misioneros/sacerdotes y sus hijos. También se realizaron dos movilizaciones en Barranquilla y Cartagena; en total asistieron unos 650 jóvenes. Para estas movilizaciones se hizo una obra de teatro basada en Eclesiastés 1 y 2 llamada "La Vida de Eclesiano Plácido." La obra tenía 5 escenas en las que se daba a conocer el personaje principal, Eclesiano Plácido (EP), un joven adinerado y encantador en su búsqueda de la verdadera felicidad.
A continuación un resumen de la obra:
EP comienza buscando la felicidad en el obsesivo conocimiento, de lo cual al final se aburre y expresa: "he observado todo cuanto se hace en esta vida, y todo ello es absurdo, ¡es correr tras el viento!" (Eclesiastés 1:14). Luego EP busca en los placeres de la vida la felicidad. Tiene muchas novias, parrandea a toda hora, pero de esto no queda sino el haber hecho el ridículo y un embarazo no deseado. De esta experiencia exclama EP: "A la risa la considero una locura; en cuanto a los placeres, ¿para qué sirven?" (Ecle 2:2). Después de haberse frustado buscando la felicidad en los placeres, EP decide invertir su dinero en bienes materiales, los cuales le dieron temporalmente un poco de felicidad, pero, EP tuvo un accidente automolístico lo cuál fue poco a poco acabando con sus bienes materiales pues debió vender sus posesiones para pagar las cuentas médicas. Muy arrepentido y con rabia exclamó EP: "Aborrecí entonces la vida pues todo cuanto se hace en ella me resultaba repugnante. Realmente, todo es absurdo; ¡es correr tras el viento! Aborrecí también el haberme afanado tanto en esta vida, pues el fruto de tanto afán tendría que dejárselo a [un desconocido], y ¿quién sabe si éste sería sabio o necio? Sin embargo, se adueñaría de lo que con tantos afanes y sabiduría logré hacer en esta vida. ¡Y también esto es absurdo!" (Ecle 2:17-19).
Finalmente EP se encuentra un día con un grupo de Cristianos quienes le enseñan a él que la verdadera felicidad no está al final del camino, sino que se encuentra muy cerca, claro está que la verdadera felicidad solo puede llegar de la mano de Dios. EP lo que había hecho era haber buscado la felicidad en los lugares menos indicados: placeres, bienes materiales, las amistades, etc. Y desde el momento que EP conoció el grupo de Cristianos se dio cuenta que la verdadera felicidad está en conocer a Dios y dejar que él le haga feliz. Concluye EP, y la obra de teatro, con lo siguiente: "Nada hay mejor para el hombre que comer y beber, y llegar a disfrutar del sus afanes. He visto que también esto proviene de Dios, porque ¿quién puede comer y alegrarse, si no es por Dios?" (Ecle 2:24-25).

Después de acabarse la obra tuve la oportunidad de desafiar a los jóvenes a encontrar la verdadera felicidad en Dios, y dentro de lo que los motivé a hacer, les dije que a su vecino le dijeran: "aja! no seas un Eclesiano."

En la Costa Colombiana entonces, hemos comenzado a utilizar una frase: "oiga, no sea un Eclesiano." Ser un Eclesiano se está convirtiendo en sinónimo de ser una persona que busca la felicidad en los lugares menos indicados. Ser un Eclesiano quiere decir que la persona no ha admitido que la verdadera felicidad solo se encuentra en Dios.

Le invito pues a que "no sea un Eclesiano."

1 comentario:

MOVIMIENTO ALFA Y OMEGA dijo...

Cuando hoy, en pleno siglo XXI los Eclesianos (ecclesiālis)º siguen y tratan de discutir sobre el Misterio de Jesucristo, (que nos es màs que San Juan 1:16) el llamado a los creyentes debe ser a superar cualquiera de los tipos de teologias creadas, -de liberaciòn (politica y sociedad del evangelio), dogmatica (atributos de Dios), escolastica (filosofia), mìstica (moral), natural (razòn), pastoral (ayuda al alma) y de esta forma dejar que sus vidas revolucionadas (entendidas como el Cambio rápido y profundo en cualquier cosa)presenten al Jesùs de la Biblia (San Juan 4:25-26) "Yo soy, el que habla contigo".

Ejemplo: // Mateo 9:27-31 // La Biblia dice que Jesùs sano dos ciegos, luego de ellos seguirle hasta su casa. La pregunta es, ¿Por que Jesùs les manda a que guarden silencio? Y ¿Que hace que estos hombres desobedezcan esta peticiòn de Jesùs? Vale la pena entonces reflexionar, sobre, cual es la realidad y practica de mi fe, y hasta que punto estoy despuesto a callar frente a mi realidad y la de otros. (Romanos 1:8)